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Las practicas de Yoga para niños van dirigidas a niños con edades desde los 6 años hasta los 13 años aproximadamente, siempre dependiendo de cada niño.
El yoga es una disciplina oriental milenaria. Los beneficios de su práctica desde la niñez son muchos y variados, de ahí que en los últimos años se haya incorporado con éxito en la currícula de las escuelas más renombradas de Occidente.
La práctica del Yoga aporta:
Equilibrio, estabilidad, buena postura. Éstas son condiciones fundamentales para la práctica de cualquier deporte o expresión corporal, las mismas son cultivadas por medio de asanas (poses) que aseguran la correcta alineación de todo el cuerpo.
Coordinación y ritmo. Como el niño pasa de postura a postura en una secuencia, los niños adquieren destreza y agilidad.
Un cuerpo sano y tónico. Practicar yoga ayudará a obtener una espina dorsal derecha, músculos flexibles, huesos fuertes y pulmones sanos con una respiración libre y relajada. Energizando y dando ánimo para la actividad
diaria.
Concentración, disciplina y atención. Estas facultades incrementan la capacidad de aprender, y se desarrolla la "atención sin tensión", dando por resultado una mente alerta, receptiva y curiosa.
Armoniza la personalidad y el carácter. Fomenta una actitud proactiva y positiva. Aumenta la capacidad del niño de darse cuenta de su estado emocional y superar los distintos obstáculos de la cotidianidad con lucidez.
Inteligencia creativa y emocional. Explorando la expresión y practicando con otros, el niño desarrolla habilidades comunicativas y respeto hacia las ideas de los demás, con quienes aprende a compartir en una ambiente propicio para el intercambio.
Creatividad e inspiración. Estas cualidades son estimuladas a través de visualizaciones, actividades artísticas, historias y "viajes guiados". La oportunidad de expresarse libremente los llevará a sentirse dueños de sí mismo, incrementando la autoconfianza y la autoestima.
Bienestar general, incluyendo la conciencia de la interdependencia de todas las cosas; proponiendo reverencia por la vida, cultivando la no violencia por medio del trabajo con sus propias energías y emociones.
